Tratamiento de piscinas desmontables: mantenimiento del agua y consejos útiles

Mantener el agua de tu piscina en perfecto estado es muy fácil. En este artículo te detallamos la terminología básica que has de conocer sobre el tratamiento y mantenimiento agua piscina. ¡Esperamos que te sea de ayuda!

pH

– ¿Qué es el pH?
El nivel de pH nos indica si una sustancia es ácida o básica. Los valores del pH están comprendidos entre 0 (grado ácido mínimo) y 14 (grado básico máximo). Un buen control del pH es imprescindible para un correcto mantenimiento piscinas.

– ¿Qué nivel de pH debe tener mi piscina?
El nivel idóneo se encuentra entre 7,2 y 7,6. Utiliza un producto para incrementar o reducir el nivel de pH de tu piscina según sea el caso.

– ¿Cada cuánto debo realizar mediciones del pH?
Cada semana. Para realizar la medición correctamente, toma una muestra de agua a 15cm de profundidad. Al principio de temporada es muy importante que realices una medición y que apliques un correcto tratamiento agua piscina, tanto si acabas de llenar la piscina como si has retirado la cubierta de invierno y vas a reutilizar el agua.

Hay varios métodos para medir el pH del agua de las piscinas. Los métodos más empleados (por su sencillez y bajo coste), son mediante el indicador de tiras de papel (que cambia de color tras introducirlo en el agua y nos indica el nivel del pH) o el método del reactivo (que consiste en llenar un frasco y echar unas gotas que cambian el color de la muestra de agua que posteriormente hemos de comparar con un código de colores).

– Síntomas de un pH incorrecto:
Un nivel de pH inadecuado impedirá que cualquier producto químico actúe correctamente. Por lo tanto, pueden aparecer diferentes síntomas como por ejemplo picor de ojos, agua turbia (marrón en algunos casos), olor a cloro o formación de algas. Un tratamiento para piscinas adecuado implica una continua vigilancia del nivel del pH.

Si estamos en la piscina y tragamos (accidentalmente) agua, podemos distinguir los diferentes niveles de pH: el ph tipo ácido posee un sabor agrio, mientras que el pH básico posee un sabor amargo.


En nuestra página web puedes adquirir un medidor del pH. Para ello accede al apartado de mantenimiento y tratamiento piscinas y a continuación selecciona “Kit de Verano”. Este kit incluye un estuche para medir el pH, un dosificador de cloro (para las pastillas de cloro), un recoge hojas, una cubierta isotérmica y un termómetro flotante.

Cloro

– ¿Qué es?
Es un elemento químico que impide el crecimiento de microorganismos en el agua. Es fundamental para la desinfección y el mantenimiento agua piscina.

– Precauciones:
Utiliza un dosificador de cloro (ver boya flotante en la imagen de la derecha). Nunca tires las pastillas directamente al fondo de la piscina porque decoloraría el liner y podría llegar a dañarlo seriamente. Es un producto irritante que debe de manejarse con cuidado y en zonas ventiladas.

– ¿Qué nivel de cloro debe tener mi piscina?
Para un correcto tratamiento de piscinas con cloro, el nivel debe de estar entre 0,6 y 1,5 partes por millón (ppm) (recomendado 1,0 ppm). La dosis de cloro a aplicar dependerá de los metros cúbicos de agua de cada piscina. Antes de aplicar el producto asegúrate de leer la dosis recomendada por el fabricante, ya que el nivel de concentración de cada producto puede variar (todos los envases de productos de limpieza de piscinas llevan una etiqueta con instrucciones de uso y explicaciones de cómo tratar piscinas).

En algunos casos es aconsejable realizar un tratamiento de choque. Se trata de aplicar una alta dosis de cloro en una sola aplicación para obtener unos resultados inmediatos. Para ello puedes comprar un producto llamado “Cloro de choque” o “Cloración de choque”. Se puede suministrar en estado líquido o en estado sólido (en pastillas o granulado). En cualquier caso, evita el contacto directo de un producto químico (sólido o líquido) con el liner. Así evitarás dañarlo o decolorarlo. Disuélvelo antes con agua para rebajarlo y dosifícalo uniformemente por toda la piscina. Por ejemplo en un recipiente de 5 litros.

– ¿Cada cuánto debo realizar mediciones de cloro?
Semanalmente durante el verano. Para un tratamiento de piscinas eficiente, recomendamos hacer una medición después de que la piscina haya sido utilizada por muchos bañistas o tras una lluvia intensa.

– Síntomas de falta de cloro:
Aparición de algas, hongos y agua turbia. Un exceso de cloro puede provocar olor desagradable, picor en los ojos y en las mucosas.

– ¿Qué es el dicloro?
Es un cloro de disolución rápida (o cloro de choque) que tiene un contenido en cloro del 56% al 62%. Se aplica en tratamiento para piscinas que requieren un efecto desinfectante inmediato.

– ¿Qué es el tricloro?
Es un cloro de disolución lenta con contenido en cloro del 90% (de uso habitual en el tratamiento de piscinas con cloro).

Alguicida

– ¿Qué es?
Es un compuesto químico cuya función es prevenir la formación de algas en el agua de la piscina. Es importante recalcar que el alguicida no elimina las algas sino que previene su aparición. Se trata pues, de un tratamiento preventivo. Para eliminar las algas será necesario llevar a cabo un tratamiento de choque.

– ¿Cada cuánto debo tratar mi piscina con un antialgas?
Es recomendable hacerlo una vez por semana, cada vez que añadas agua nueva a la piscina (en pequeñas dosis como prevención y mantenimiento agua piscina), cuando hayan temperaturas muy altas o ante la aparición de algas. En casos de calor extremo, puedes doblar la dosis. Por norma general, la dosis a aplicar es de 10 cm3 por cada m3. No obstante, antes de aplicar, leer la dosis que recomienda el fabricante.

– Síntomas que indican cuándo aplicar un alguicida
Aparición de algas, hongos, paredes resbaladizas, agua turbia o verde. Un exceso de algicida en la piscina provoca espuma en el agua de la piscina.

Floculante

– ¿Qué es?
Es una sustancia química que precipita las partículas que se encuentran en suspensión en el agua. Cuando se han depositado en el fondo de la piscina se pueden retirar fácilmente con la ayuda de un limpiafondos, quedando el agua limpia y cristalina. También se suele denominar “clarificador de agua”.

– Procedimiento:
Aplicar el floculante según la dosis indicada por el fabricante y los metros cúbicos que tenga la piscina. Durante esta operación la depuradora no debe de estar en funcionamiento porque así evitamos que el agua pase por el depósito y que el floculante estropee la arena del filtro. Si la válvula del filtro tiene la opción de “Recirculación” (el agua circula por el circuito del filtro sin pasar por la arena) entonces sí podemos dejarla en este modo mientras ponemos la dosis de floculante para que mezcle con el resto del agua de la piscina.

A continuación dejamos el agua en reposo unas 5 – 7 horas para que decanten las partículas que hay en suspensión y poder eliminarlos posteriormente con el limpiafondos manual. Poner el filtro de la depuradora en modo “Vaciado” para que la suciedad que vaya aspirando el limpiafondos vaya directamente fuera de la piscina sin pasar por la arena del filtro. Es muy importante que no nos excedamos en la dosis, ya que podría enturbiar el agua (con un aspecto blanquecino) y dañar la arena de la depuradora. Es preferible quedarse corto en la dosis de floculante que pasarse. Si la depuradora no tiene la posición de «Vaciado» ponlo en modo «Rinse» que hace la misma función.

El floculante en una piscina bien tratada casi nunca es necesario. Es recomendable hacer uso de él solo cuando es imprescindible.

Hay ciertos fabricantes que ofrecen en un sólo producto varios componentes químicos. Se llama “Cloro de triple acción” e incorpora: cloro, alguicida y floculante. Existen productos con etiquetas que indican “Cloro de 5 efectos” (o incluso más). En realidad, lleva los mismos componentes que uno de triple acción (cloro, algicida y floculante para piscinas) pero resaltan las propiedades de estos tres componentes químicos que son: clarificador del agua, abrillantador, desinfectante, bactericida, fungicida, anti-calcáreo, etc.

Como norma general, los productos químicos deben de aplicarse preferentemente al atardecer y en ausencia de bañistas.

Para conseguir un tratamiento piscinas completo, será imprescindible contar con un buen sistema de filtración, el cual, además de filtrar y depurar el agua, realizará la importante labor de disolver los productos. Los usuarios de bañeras de hidromasaje o spas, pueden seguir los mismos consejos mencionados, ya que sirven igualmente para el mantenimiento agua jacuzzi.

Un tratamiento de piscinas correcto implica la observación continua del estado del agua. El conocimiento de los síntomas y de los productos químicos que debemos aplicar según sea el caso nos será de gran ayuda para realizar un tratamiento agua piscina adecuado.

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Diego Gisbert Yanini